Ejemplos de uso de siete pecados capitales
1. La envidia es muy mala", espetó sin aclarar quién había cometido uno de los siete pecados capitales.
2. Lorenzo declaró que "he ganado por la rabia y la fuerza que he puesto". Por otra parte Pedrosa se mostraba satisfecho con la segunda posición puesto que es colíder y declaro que "en pretemporada era impensable estar en esta posición". Más información SPORT: Los siete pecados capitales del Barзa La publicación catalana abre sus páginas con la idea de un fin de ciclo ante los malos resultados en el Barзa y la más que probable salida de Ronaldinho del club.
3. "En momentos milagrosos, cuando un portugués se levanta entre el público y dice ¡ah, fadista!, he sido fadista, le duela a quien le duela". Tras Los siete pecados capitales y María de Buenos Aires, Mísia está preparando "algo de Stravinski y lieder de Brahms que voy a cantar en el Petit Palais de París en enero". Confiesa, mientras da un bocado a la tortilla de patata -"siempre que vengo a Madrid engordo"-, que el fado ha sido una terapia.
4. A ejemplo de los políticos y de todos esos personajes que, con el título de periodista o sin él, ejercen de opinadores sin que se sepa, en muchos de los casos, cuál es su mérito ni su especialidad, el ciudadano de a pie se ha contagiado de esas costumbres y opina a grandes gritos en el bar, despreciando las opiniones de sus vecinos, que, por su parte, gritan también, sin que a nadie le importe lo que el otro piensa o dice y, lo que es mucho peor, dejando detrás de sí una de estela de arrogancia que tiene su raíz en la idiosincrasia hispánica, esa que Díaz-Plaja resumió en un libro de gran éxito, El español y los siete pecados capitales, en el que venía a decir que el principal de éstos es la soberbia ("¡A mí me vas decir!", "¿Qué sabrás tú?", "Te lo digo yo y punto", son algunas de nuestras expresiones más comunes), y que se acrecienta hoy con la virulencia ambiente, esa que viene de los políticos y que se transmite de arriba abajo como en una cadena de transmisión.